La publicidad muestra a un par de jóvenes que van a una farmacia a comprar condones. Ante su indecisión, una empleada les sugiere que los prueben. Se ve entonces a la pareja teniendo relaciones sexuales con los distintos condones en varias partes de la farmacia.
Tras varias posiciones y comentarios de los presentes, la pareja da con el tipo de condón adecuado.